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Primera Sentencia Millonaria para los cooperativistas de Terramagna

Primera Sentencia Millonaria para los cooperativistas de Terramagna

Entre los años 2005,2006 y 2007, un conjunto de personas, en su mayoría, de la tercera edad, emplearon sus ahorros para comprar un apartamento en una Residencia de Lujo de mayores, Terramagna. 

Sueño que se vio truncado, al verse abocada la cooperativa que se constituyó para ello, a entrar en concurso de acreedores, por la mala gestión llevada a cabo por sus dirigentes.

Tras años de concurso de acreedores, en el que los propios perjudicados no se les reconoció ni como acreedores, al ser socios de la cooperativa, y años de instrucción penal contra los responsables de tal mala gestión, el pasado 4 de junio 2019, finalmente Javier Carrión, socio funddor de Carrión_Salamanca Asociados, consiguió que se hiciera justicia, a través de una sentencia, dictada por primera vez, por el juzgado de lo mercantil nun 1 de Sevilla, que ha supuesto un hito histórico en todo lo relacionado con la famosa Ley 57/68, en beneficio de todo comprador que anticipó parte del precio para adquirir una vivienda y que finalmente perdía lo aportado sin que se le entregase la vivienda Pues bien, tras más de tres años de esfuerzos y sacrificios para conseguir el reconocimiento de los derechos a los cooperativistas.

Según Javier Carrion, es la primera sentencia dictada por un juzgado de lo mercantil que reconoce como consumidor final tanto a  personas jurídicas, como a aquellas personas q compraron varias unidades habitacionales, quienes calificados de inversores, nunca se los reconoció lo que habían anticipado.

También ha supuesto un avance importante, para el régimen de auto promoción que rige las cooperativas, ya que, al ser los propios perjudicados, socios de la mercantil, nunca se les había reconocido la devolución de sus aportaciones en concepto de capital social que les daba su condición de tales Así mismo es una de las primeras sentencias en reconocer intereses al 6% desde que hicieron sus aportaciones, lo que ha supuesto el reconocimiento de más de un millón de euros.

Duro revés para la entidad bancaria Abanca, que finalmente ha de responder, al incumplir su obligación in vigilando.

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